Si alguien les pregunta que es lo que me pasa, solo díganle que estoy triste, y si luego preguntan el porqué, solo díganle que estoy triste sin motivo alguno… pues no quiero recordar a cada minuto esa razón tan dolorosa de porque mis ojos están hinchados tanto llorar, no quiero pensar a cada segundo en e4sa noche tan dolorosa en la que él me dio el último beso, en la que por última vez me envolvió con sus brazos, en que me dijo se acabó…
No crean que fue una razón cualquiera, siempre cuando una relación se termina es por causa de la falta de amor por parte de ambos, o de uno, y créanme, estaría conforme si esa fuera la razón.. .y a pesar de que por amor no nos quedamos, al contrario, nos seguimos amando como siempre lo hemos hecho, ¡o quizás mucho más!... pero una vez más, la realidad se encarga de demostrarnos que ese cuento de hadas que cuando pequeños a todos nos contaron, esa historia en que el amor lo puede todo, vence las barreras y aunque el mundo se le caiga encima sigue ahí, firme, y nada ni nadie puede separar a la pareja, la puta realidad se encarga de mostrarnos, a mí, y de la manera más dolorosa posible que no existe, que nos mintieron, que no siempre el amor de tu vida se va a quedar a tu lado, que a pesar de que las experiencias juntos pesan, que el sentimiento es fuerte, ¡inmenso! Las cosas no funcionan…
Quizás es una cosa de suerte… y como envidio a los que la tienen… porque el poder caminar de la mano junto al ser amado es lo más bello que a una persona puede ocurrirle, porque el abrazarlo es la protección y la seguridad más grande que un ser humano puede sentir, porque el besarlo es el triunfo más esperado de cada día que transcurre a su lado, porque el hacer el amor no tiene las palabras suficientes ni precisas para describir tan maravillosa y sublime experiencia…
No puedo decir que estoy conforme, pues, como dije antes, el amor nunca ha faltado… y es la realidad, a la que tanto he odiado y a la que tanto quisimos cambiar, juntos, tomados de la mano la que hoy día nos dice, ¡perdón! Te dijo “ya no más”…y tú, tonto, cobarde e imbécil le has creído, porque piensas que por estar lleno de cicatrices no podemos aspirar a un futuro mejor, porque piensas que no puedes ser un buen hombre, porque ¡POR LA CRESTA! Estas convencido que solo daño me causas con tu presencia ¡¡¡como mierda hacerte entender que el peor daño que puede provocarme es alejándote, que tu presencia para mi es lo mejor que la vida me ha podido regalar, que no quiero que esto sea como un oasis en el desierto, porque quiero seguir bebiendo de esta agua, quiero seguir empapándome con ella, quiero seguir viendo mi cara en el reflejo que me brinda!!!…
Y no es eso lo que quieres realmente… es tu razón la que habla, ¿y recuerdas lo que ha pasado las ultimas cientos de veces que has intentado utilizar la razón conmigo?... somos seres extraños, no priorizamos lo que todo el mundo prioriza, no amamos lo que todo el mundo ama, no pensamos como todo el mundo piensa… y no razonamos simplemente porque nuestros corazones predominan en nosotros, pues amamos la locura, el caos, la sensación plena cuando llegamos al orgasmo y lo libres que nos sentimos cuando estamos juntos… libertad que hoy se esfuma, porque, irónicamente, hoy me siento más prisionera que nunca de un mundo que espera de mi algo que no soy, un mundo que quiere que le dé resultados óptimos, un mundo que me ve de una manera errada… y te juro, por las dos personas que más amo en este mundo, por todo lo bello que hemos vivido desde que éramos simples amigos que se reían del mundo, hasta ser las personas que por necesidad debían amarse… te juro, por todo lo que eso significa, ¡para los dos!, que esa libertad que yo desde pequeña tanto he deseado, tanto he pedido y por la cual tantas lágrimas he derramado, ¡eso! Solo lo encuentro en ti… junto a ti…
Me da una impotencia enorme no poder hacer nada… y quiero odiarte ¡por Dios como quiero odiarte! Pero esto es más fuerte que yo… y sé que tú así lo deseas, quieres que yo pida tu muerte, pida verte sufrir, quieres que me sienta libre y plena al no estar atada a ti… pero lástima que aquella canción relate tan bien lo que el uno siente por el otro, desde siempre, porque “quieras o no estás adentro…”
Y ella… ¿la otra?, ni siquiera ese título merece… es un parasito, una piedra que obstruye el camino, mi camino… si tan solo la amaras, porque ni eso es así, te conozco tanto, y quizás eso me tranquiliza… fuiste chueco, ¿Quién no? Yo jamás te comente que tenía un blog en el que escribía cada vez que la inseguridad me invadía y el miedo se calaba por cada rincón de mi cuerpo, jamás te comenté que aun extrañaba las palabras de ese personaje que un día me ayudo como nadie lo hizo en aquel entonces, jamás te comente mi miedo a volver a ser la misma mierda que al mirarse al espejo se veía asquerosa, jamás te comenté a quien vi la madrugada del 10 de mayo del 2008 luego de esos tres días complicadísimos para ambos, en los que lloramos, en los que nos despedimos y me dijiste “hasta que la vida nos vuelva a juntar” y el grillito partió… si, fuiste un chueco de mierda, pero ella, ¡ella! Una pobre imbécil que piensa que con esto me va a devolver todo lo que antes había ocurrido… pero ella no sabe que jamás quise lastimarla, de verdad no era mi intención, solo me fije en la persona incorrecta, solo me enamore sin querer… claro, ese jamás es hasta ahora, porque las cosas entre nosotros han cambiado, han sido muchos momentos, muchas experiencias… porque un día tu pasaste a formar parte de mi, pasaste a ser algo netamente mío, y es eso precisamente lo que hace que este dolor, que esta pena que siento sea tan profunda, algo que va mucho más allá de un término común…
Pero no te puedo obligar a nada… no puedo solucionar esto poniéndote una pistola al cuello y obligándote a estar a mi lado… solo puedo esperar, esperar y esperar, como lo he hecho siempre, tener paciencia, contar hasta mil si es necesario… y por ahora intentar parar de llorar… porque mis ojos están cansados y mi alma esta desganada…
…y si preguntan qué me pasa, díganle que estoy triste, y si preguntan la razón… solo digan que es sin motivo alguno… y que todo esto nunca existió…
No sé si lo leas… me gustaría que lo hicieras… pues eres y siempre serás mi mejor amigo, mi mejor amante, la persona en la que confío a ojos cerrados y por la cual sin pensarlo daría la vida… se que aun me queda mucho camino en esta vida… pero también sé qué cosas así solo pasan una vez y son inolvidables… y que las promesas que alguna vez te hice, todas las voy a cumplir... ahora no se como, pero lo haré... ya hora no diré que te amo, pues eso no tienes porque leerlo de aca, ni tu ni nadie... eso no se lee, se demuestra de otras formas...
Gracias por existir.