A veces digo cosas que, al decirlas, son simples comentarios que no tienen mayor importancia, pero que la otra persona responde de una determinada manera, a la que yo respondo otra cosa, y la otra persona otra, y así, aquel simple comentario se transforma en una especie de debate, o en el peor de los casos, el otro se lo toma a mal y es una pelea. Hoy ocurrió, bueno, no al extremo de una pelea, pero si de una discusión algo molesta, y sobre algo tan simple como un “detalle”. Le comente a mi novio que él no era para nada detallista conmigo, y que a veces me gustaría que lo fuera, a lo que él me dijo, que jamás lo había sido con nadie. Es verdad, él no es detallista, y quizás eso me atrajo de el al conocerlo, aunque, como le dije, es una gran contradicción en su persona, pues los poetas si son detallistas... y poetas… y aquí vienen, con una palabra, un comentario pequeño, un “detalle”, el relacionar una palabra, con otra palabra y esta con otra, y con otra y otra hasta llegar a aquel estúpido recuerdo y el punto exacto en el que, el haber sido solo su mejor amiga por tanto tiempo pesa, y es cuando me contaba los detalles que le hacía a su ex. Si, recuerdo que eran pocos, pero eran, lo que es a mí, me he conformado todo este tiempo con una grulla de papel lustre que me regalo en una plaza hace ya más de tres años. Sí, mi lado rencoroso, ese que jamás olvida algo, ese “detalle” le molesta, y surgen esas comparaciones tontas que solo en mis días inestables, (que cada vez son menos, pero que en la misma proporción odio mas y por eso intento omitir) hacen que me compare hasta con mi sombra, y ese “detalle” me hace pensar ¿y yo qué?... En fin, el hombre se deshizo en explicaciones y que trataría de cambiar, yo, por mi parte, odie haberle hecho el comentario… porque ese “detalle” otra vez me hizo relacionar palabras y llevarme a algo relacionado con la nota anterior, y quizás si le doy importancia a lo que ocurrió con aquella persona a la cual saco hoy de mi vida, y si, o hago por un “detalle”: la raíz de todo fue un “detalle” en un comentario x de una conversación cualquiera… y es curioso, yo saco a esa, o más bien, esas personas, o esas personas me sacaron a mi antes y con otro comentario “detalle” me hacen sentir que la falla soy yo… Y ahora, viendo fotos, pensando las cosas, ordenando una serie de “detalles” llego a la conclusión de que como siempre, esto lo vi venir y tenia necesariamente que pasar… pero, a diferencia de otras ocasiones, aquel “detalle” dicho aquella vez, me hace pensar que no me arrepentiré del paso que daré a partir de finalizado esto que escribo, pues al final, por aquellos “detalles” al parecer, no les importaba tanto mi presencia a esas personas, pues los “detalles” agradables disminuyeron de golpe, abriendo mis ojos y viendo aquellos que no eran del todo bellos.
Entonces, a raíz de esto podría decirle a mi novio que sí, es bueno ser detallista, se ve muchas veces el cariño de la gente, la dedicación que se le da. Hoy en día, ese “detalle” casi ni se ve por aquí.
Uf! Que texto mas incoherente!
Por Eso Estamos Donde Estamos
Hace 1 día